Martes 11 de septiembre. Del lado de Guatemala a mí me pidieron por primera vez la constancia de vacunación contra fiebre amarilla. Menos mal que la tenía sino hubiera tenido que pagar lo que creo estaban buscando que es un billete por debajo de la manga. Tampoco fue tanto, el trámite duró lo normal, aproximadamente 1,30hs. Seguimos hasta que a Gustavo unos carteles que anunciaban un restaurant de mariscos se le antojó y paramos a almorzar. Llegamos a eso de las 4pm a la ciudad capital de Guatemala y fuimos a un centro comercial a que nos buscara Quique otro amigo motociclista de Gustavo al que había conocido personalmente cuando pasó en su viaje bajando de ida. Como la moto seguía con problemas de batería y nos estaba causando inseguridad al estar alambrando cada vez que Gustavo intentaba prenderla, decidimos ir a un concesionario oficial para que la vean. Una vez que dejamos la moto, Quique nos acompañó a buscar alojamiento pero estaba difícil, o no había en zonas segras, o eran my caros, o muy feos. Amablemente Quique nos ofreció quedarnos en con él y aceptamos, por lo que fuimos hasta la casa de Quique a dejar las cosas. En su casa estaba su primo Jurgen al cual Gustavo también conocía de la vez pasada. Fuimos a cenar al restaurant italiano Margherita
http://www.tripadvisor.es/ShowUserReviews-g292006-d2042120-r140200419-Margherita-Guatemala_City_Guatemala_Department.html
Miércoles 12 de septiembre. Nos despertamos temprano y miramos televisión hasta que llegó la señora que nos prepararía el desayuno. A las 9am vino Jurgen a buscarnos para llevarnos hasta un hostel desde donde partían a hacer un city tour. Fuimos sólo nosotros con el dueño que era quien lo hacía en su van. Nos fue mostrando diferentes monumentos, edificios, barrios, y cosas en las calles de la cultura de la ciudad. Al llegar al centro histórico de la ciudad nos bajamos y fuimos a conocer la catedral, la casa de gobierno y la plaza principal. Después visitamos el mercado, nos hizo probar unas comidas típicas muy ricas y en la sección de artesanías consiguió que me pudiera probar un huipil, atuendo típico de las mujeres. Me compré una libreta. De regreso al hostel nos recomendaron ir a los museos de Ixchel y Popol Vuh arqueología. Fuimos caminando con una señora de Bélgica. Sin cámaras porque no nos lo recomendaron por la seguridad. Vale la pena comprar el ticket de q75 por los 3 museos. Primero fuimos al museo Ixchel del traje indígena
http://www.tripadvisor.es/ShowUserReviews-g292006-d307308-r140201171-Museo_Ixchel_del_Traje_Indigena-Guatemala_City_Guatemala_Department.html
Era muy completo pero algo extenso y con muchos carteles que leer. Había una cantidad enorme de huipiles de las diferentes regiones del país cada uno con su significado según región y ocasión para la cual se usa. Seguimos por el museo nacional de arqueología y etnología
http://www.tripadvisor.es/ShowUserReviews-g292006-d307903-r140201440-Museo_Popol_Vuh-Guatemala_City_Guatemala_Department.html
Lástima que no contábamos con mucho tiempo y no le pude dedicar el tiempo que se merecía.
Volvimos caminando al hostel, nos buscó Jurgen y fuimos a buscar a su hija a un centro comercial donde mientras esperábamos a que viniera Quique tomamos un helado. Cuando vino nos llevó hasta su casa, preparó pasta, cenamos y me quedé mirando tele.
Jueves 13 de septiembre. Desayunamos con Quique y nos llevó a buscar la moto. Cargamos todo a la Juana y partimos hacia Antigua. Cuando llegamos oh ! sorpresa, el volcán de Agua, también conocido como Hunahpú por los mayas había entrado en actividad esa misma mañana. Muchas personas al igual que nosotros estaban sacando fotografías y hasta ese momento no lo sabíamos pero era una conmoción porque había pasado un tiempo considerable sin que emanara humo de su cima. Ya habían evaluado algunos pueblos de la región cercanos a la zona por donde en caso de erupción caería la lava. Estuvimos buscando alojamiento hasta que en una esquina nos cruzamos a Eusebio Balan Estrada, guía de turismo
chevitotours@yahoo.com
que para nuestro presupuesto ajustado nos recomendó el guest house El viejo Danés al cual él era conocido e iba a tomar café. Dejamos las cosas y salimos a almorzar al mercado que quedaba a pocas cuadras. Después Gus se regresó a descansar y yo salí con mi cámara de fotos a retratar ese increíble pueblo colonial lleno de rincones y detalles. Me compré unos dulces y vi que enfrente había una de las tantas iglesias en ruinas por los temblores que las desbarataron pero aún en pie y entré. En su interior con paredones llenos de rajaduras y sin techo habían armado estructuras de madera tipo stands que servían de talleres, los había de carpintería, cerámica, pintura y otros. Había unas personas reunidas que notaron mi presencia pero no me dijeron nada. Lo digo porque al día siguiente que pasé la reja de la puerta estaba cerrada y ya no se podía entrar, con lo cual fui afortunada. Caminé hasta llegar a las fincas de las afueras del pueblo donde había plantaciones de café y caserones mucho más grandes que las casas del conurbano. Me crucé una orquesta de un escuela de adolescentes que estaba practicando para el acto de la noche y el día siguiente por las fiestas de la independencia. Me senté a escucharlos un rato y seguí cruzando una iglesia en ruinas y otra en donde hay un árbol de esquisuchil sembrado en 1657, o sea hace 355 años por el hermano Pedro de San José de Bethancour. Al ir de regreso para el hostal me crucé la casa en donde había vivido Pedro de San José de Bethancour. Y también topé con un local de un estadounidense que vive en Antigua desde 1985 y hace café y chocolate orgánico. En una de las paredes tiene pintado cómo era el pueblo cuando él llegó (mucho mas pequeño, claro) y me platicó sobre esto. Compré unos chocolates. Al llegar me quedé en el hostel un rato con internet y después del atardecer salimos a recorrer el pueblo iluminado por farolas amarillas. En la plaza principal había desfile de orquestas de escuelas de niños y una de las antorcha por la que tenían que pasar quienes estaban haciendo el circuito corriendo. Cenamos algo y nos fuimos a dormir. En la madrugada me desvelé y me puse a escribir este blog. El cielo estaba claro y las estrellas resplandecientes.
Viernes 14 de septiembre. Fuimos al mercado a comprar para desayunar. Gustavo vio que vendían unas bolitas tejidas en crochet de los angry birds y se quiso comprar el juego completo. Como en ese puesto el vendedor no tenía todos los que quería tuvimos que esperar a que fuera hasta otro puesto que tenía en el centro. Al final no tenía todos los que hubiera querido pero compramos algunos. Desayunamos en el hostal y salimos. En la plaza principal otra vez había desfile pero esta vez participaba más gente. Fuimos hasta el arco característico de Antigua que cruza de lado a lado la calle y seguimos hasta otra iglesia en ruinas, y otra mas partida justo al medio en su frente. El volcán había dejado de emanar humo. Como era fin de semana de fiestas patrias ya se notaba que comenzaban a llegar muchos turistas locales, sobre todo de la ciudad de Guatemala que queda a tan solo 40 min. Muchos indígenas con sus trajes autóctonos de fiesta estaban vendiendo artesanías. Me llamó la atención que no había artesanos viajeros o extranjeros. En la calle nos encontramos a Chevito el guía que nos había recomendado el hostal y nos pasó tips sobre lugares para ver en la ciudad y pueblos donde alojarnos en torno al lago Atitlán. Como nos lo recomendó, lo acompañé a Gus a ver el árbol de esquisúchil. En el camino pasamos a ver una sala recientemente inaugurada, perteneciente a un actor famoso, en la que difunden el cine guatemalteco. También de camino pasó una camioneta a la que se le cayó una bolsa con unos 3kg de chicharos. Gustavo se puso muy contento a jugar que era trabajador del campo cargando su bolsa con intenciones de venderla. Al llegar al árbol, unas señoras nos regalaron unas hojas y flores que habían caído del mismo diciéndonos que bebiéndolas como infusión eran milagrosas. A cambio le dimos unos chicharos. Volvimos caminando un tramo y luego tomamos un moto taxi hasta el centro. Fuimos hasta una de las plazas donde había puestos de comida casera, comimos un guisado y vendimos los chicharos por unas pocas monedas. Regresamos al hostal a descansar. A la noche visitamos una exposición fotográfica y un centro de artesanías.
Sábado 15 de septiembre. Salimos a media mañana hacia el lago Atitlán. Apenas salimos de Antigua Guatemala notamos que había mucho tráfico de gente que se estaba trasladando por las fiestas patrias. En varias ocasiones quedamos atascados porque cuando las bandas pasan por los tramos de carretera el tráfico se para hasta que termine de pasar el desfile. Lo bueno fue que nos tocó ver y escuchar a varias bandas en diferentes poblados. En el camino pasamos por un mirador desde donde se apreciaba por primera vez el lago desde lejos. El entorno era muy bello con montañas altas y verdes y nubes densas que filtraban rayos intensos de luz que contrastaban con las sombras. Una hora mas de viaje y llegamos a Santa Catarina que es el poblado más turístico alrededor del lago Atitlán. Desde ahí salen lanchas hacía los poblados al otro lado del lado a los que no llega la carretera. Pasamos a conocer, pero nosotros no queríamos quedarnos en ese que si bien pequeño muy turístico, sino que queríamos ir a uno más en contacto con los locales. Continuamos hasta San Antonio, uno de los pueblos que nos había dicho Chevito, averiguamos por alojamiento y visitamos por fuera una iglesia muy bonita. Pero quisimos ir un poquito más allá hasta San Antonio Palopó que era más pequeño. De todas formas era my cerca, desde Santa Catarina es una media hora y desde San Antonio unos 10min. Llegamos a San Antonio Palopó y en el primer lugar en que averiguamos por alojamiento estaba muy caro. Seguimos preguntando y llegamos hasta el hotel Terrazas del lago
http://www.tripadvisor.es/ShowUserReviews-g315770-d316436-r141156675-Terrazas_del_Lago-San_Antonio_Palopo_Lake_Atitlan_Solola_Department_Western_Highl.html
Le regateamos el precio hasta que aceptó y conseguimos una habitación linda con vista al lago, baño privado y balcón. Dejamos las cosas y fuimos a almorzar a un restaurant frente al lago. Volvimos al hotel a dormir siesta y por la noche caminamos por el pueblo y comimos unos snacks.
Domingo 16 de septiembre. Fuimos en moto hasta Santa Catarina, desayunamos en la calle y caminamos por el malecón viendo los artesanos hasta la calle principal que está llena de cafés, negocios y cosas para ver. Volvimos al malecón y nos sentamos en un restaurant frente al lago a almorzar. Como quien no quiere la cosa comenzamos a conversar con Samuel, un señor que nos invitó una cerveza e invitó a que lo visitáramos en su casa. Regresamos a San Antonio Palopó al atardecer y nos quedamos en el hotel.
Lunes 17 de septiembre. Partimos con destino MÉXICO !! después de 5 meses y cachito de haber salido de Argentina.