Es curioso como llueve aquí (Bueno....Curioso, si lo ves a través de una ventana, puñetero si te pilla en la calle!). Ayer estaba en un bar, y fuera empezó una tormenta de lluvia y viento que duró 20 minutos escasos. Me preocupé porque esa tarde había sacado mi ropa a secar al balcón, y el cielo no tenía pinta de lluvia así que lo dejé sin pinzas. Viendo la que estaba cayendo donde estaba (que no está lejos de mi nueva casa) dí mi ropa por perdida. Con ese viento era imposible que no salieran volando.
Pero volví a casa, y todo estaba seco. No había llovido en mi zona! Es como si llueve a lo bestia en Argüelles, mientras el sol brilla en Alonso Martínez!
Así, me han dicho, son los monzones de aquí. Nada que ver con más al sur. En Bombay puede llover 13 días sin parar. La ciudad se colapsa. Y es imposible ir a trabajar los primeros días (estoy pensando en irme a Bombay…).
Delhi sin embargo, tiene lluvias esporádicas. Duran de 10 mins a 2-3 horas. Máximo, un par de días. Y aparecen igual de rápido que desaparecen. Aquí no puedes decir: “Uy, hoy hace buen día. No parece que vaya a llover. Me voy a poner mi vestido blanco y mis zapatos de cuero!!” porque minutos después puedes acabar con un vestido transparente y los zapatos llenos de moho!!
El momento en el que el cielo empieza a nublar, y el viento a soplar, sabes que viene una gorda. A mí, todavía me asusta. Tus alrededores se vuelven completamente oscuros y los árboles comienzan a bailar pachanga! Pero soy la única que siente ese miedo europeo. Digo europeo porque cuando esto ocurre en nuestro país, pensamos “uyuyuy…va a caer unaaaaaaaaaaa….” Y nos vamos al cobijo más cercano. Los días de lluvia para la mayoría de nosotros, son días de estar en casa. Los indios sin embargo, salen de donde estén y esperan a que les caiga la lluvia encima. Las nubes bajas a punto de explotar, esa sensación de tormenta, les encanta. A mí lo que me encanta es la huella que deja una vez que ha pasado. El aire está más fresco (el termómetro baja unos 3 grados, que aquí se agradece enormemente) y deja de haber polvo el resto del día. Y es por eso que quiero que llegue el monzón YA!
Ahora no me puedo quejar la verdad. Me he cambiado de piso, y aunque mi máquina de aire funciona muy mal, mi ventilador funciona estupendamente y además me entra una brisilla muy agradable por el balcón de mi habitación (Sí!! Tengo balcón! Es una gozada!). Somos tres chicas viviendo juntas. Una rusa, otra americana (y su novio) y yo.
And so far, so good!
Llevo aquí solo cuatro días, y ya me siento como en casa. Así que ya tenéis un sitio agradable donde quedaros si os entra la vena de venir a verme a Delhi!!!