The Joy of Pilgrimage Looking for our heart change through the ancient wisdom from India

En Delhi lo más común es tener que pactar el precio con las Rickshas. Como tienes un cuerpo occidental todos se vuelven codiciosos, pero si coges experiencia al final acaban llevándote con el impuesto revolucionario incluido que son de 10 a 20 rupis más por ser extranjero. Fuimos al templo de ISKCON y al Raj Gath, donde pasaba el Yamuna, la pena es que el curso del Yamuna cambió y solo tuvimos abrumación por el calor. Después fuimos al Yamuna en Ricksha y resulta que el único lugar en Delhi donde te puedes acercar al Yamuna en lo que se consideraría un Gath es: UN CREMATORIO! Si fuimos aun crematorio, la sensación fué sin duda fuera de lo común, vimos escenas de llanto, cuerpos envueltos para ser quemados y algunos quemándose. La sensación es: Yo también voy a pasar por aquí. Así que más vale que me prepare. Ahí empiezas a pensar en qué vale la pena en la vida y qué no. Por lo menos la siguiente media hora después de visitar el crematorio y poner sobre nuestras cabezas unas gotas del río sagrado, la conciencia es sumamente espiritual y grave. El resto de nuestra experiencia en Delhi fué en el Hospital Apolo, que por cierto nos quedamos muy contentos por la atención que recibimos. No dudaría en recomendarlo. No sé en otros departamentos pero en cuanto se refiere a nefrología muy bien. Tuvimos la clásica diarrea de 15 días. En mi caso por zamparme un Thali muy variado, especiado y picante dos días seguidos. El agua embotellada siempre, pelando la fruta etc. Nuestra parte de Peregrinaje en Delhi fue bien. Aun a pesar del desarrollo urbano y la pasión de la ciudad. Aunque me queda la sensación que Delhi es más para trámites y compras que para peregrinar.